Trasplante del aparato extensor
(aloinjerto del aparato extensor)
El trasplante del aparato extensor es uno de los procesos más delicados y complejos de la cirugía reconstructiva de la rodilla.
Está indicado en aquellos pacientes a los que se les ha colocado una prótesis de rodilla y hay una lesión importante o incompetencia de cualquier parte del mecanismo extensor. También en aquellos pacientes con una artrodesis de rodilla a los que se les pueda colocar una prótesis.
El aparato extensor de la rodilla está constituido por el tendón del cuádriceps, la rótula y el tendón rotuliano. La integridad de sus componentes es vital para que la rodilla funcione correctamente. Cuando el tendón rotuliano, el del cuádriceps o el aparato extensor completo se lesiona de manera irreparable, después de la colocación de una prótesis total de rodilla o debido a un tumor o una malformación, se plantea un problema muy difícil de tratar. Por suerte, esto ocurre con muy poca frecuencia (de un 0,17 a un 2,5% del total de prótesis total de rodilla).
Si alguno de los componentes del aparato extensor se lesiona, se produce una pérdida de la capacidad de extender la rodilla. Es una lesión muy incapacitante que impide al paciente caminar con normalidad. Para caminar, el paciente tiene que usar una ortesis, que es un aparato que bloquea la rodilla recta, y en el caso de que no pueda hacerlo, deberá recurrir a la silla de ruedas. Además, la pérdida de musculatura y las fuerzas elevadas que se ejercerán sobre la prótesis total de rodilla hacen que sus componentes se aflojen en poco tiempo. Por ejemplo, si el tendón rotuliano se rompe, la rótula asciende por la tracción del músculo cuádriceps. Si no se trata de forma adecuada, las consecuencias son devastadoras: por un lado, la rodilla pierde funcionalidad y hay que recurrir a la silla de ruedas para desplazarse y, por otro, se produce un aflojamiento de la prótesis de rodilla en menos de 1año. Debido al aflojamiento es necesario cambiar la prótesis total de rodilla en el momento de reconstruir el aparato extensor lesionado, para que el paciente pueda volver a caminar con normalidad.
En junio de 2006, en el Hospital Universitario de Son Dureta, el Dr. Andrés Camprodon realizó el primer trasplante de aparato extensor completo. Reconstruyó una rodilla que había perdido el tejido tras una infección severa.
El trasplante de aparato extensor consiste en injertar un nuevo tendón del cuádriceps, una nueva rótula, un nuevo tendón rotuliano y un fragmento de la tuberosidad tibial de un donante (estos se obtienen del Banco de Tejidos, que vela por su seguridad y su calidad). Este trasplante presenta la dificultad añadida de que casi siempre hay que cambiar la prótesis total de rodilla en el mismo acto quirúrgico. El cambio de prótesis hay que realizarlo en escenarios extraordinariamente difíciles en los que ha habido una pérdida de hueso desmesurada. El aloinjerto completo de aparato extensor consiste en un fragmento completo de tuberosidad tibial, el tendón rotuliano, la rótula y tendón del cuádriceps congelado, que sustituirá al ausente o deficiente, y se implanta mediante una técnica meticulosa.
Desde el año 2006 el Dr. Camprodon ha reconstruido con éxito numerosas rodillas que carecían de aparato extensor. Se trata de una técnica muy exigente, que requiere una curva de aprendizaje muy larga. Casi siempre conlleva el cambio de la prótesis de rodilla en el mismo acto quirúrgico, en escenarios de pérdida masiva de hueso.
Restauración del hueso alrededor de la rodilla
La pérdida de hueso alrededor de la rodilla en el entorno del reemplazo total de rodilla presenta un reto para los cirujanos ortopédicos. Cuando la pérdida ósea es masiva una buena opción son los aloinjertos masivos de hueso, pues suponen una reconstrucción duradera y sólida, permiten soportar peso y recuperar movilidad.
En ocasiones, cuando el cirujano tiene que realizar un reemplazo de rodilla o un cambio de prótesis tiene que enfrentarse a una pérdida de hueso masiva, debido a infecciones previas, tumores o traumatismos. En estos casos es imposible colocar o cambiar una prótesis de rodilla sin restaurar la masa ósea. El trasplante de aparato extensor requiere una técnica muy meticulosa, donde cada detalle cuenta. Este procedimiento requiere una habilidad singular, pues la colocación de la nueva prótesis ha de ser milimétricamente perfecta para asegurar el éxito del reemplazo del aparato extensor. Es necesario dotarlo de la tensión adecuada, pues si la tensión es excesiva, el paciente no podrá flexionar la rodilla del todo, por el contrario, si la tensión es insuficiente, la extensión no será completa.
La recuperación Para asegurar el éxito de esta operación es necesario seguir detalladamente las instrucciones del cirujano ortopédico. Se establece un protocolo de rehabilitación estricto y prolongado que incluye la inmovilización completa con un yeso durante 9 semanas.
El doctor Camprodon es uno de los pocos cirujanos de todo el mundo que realizan con éxito el trasplante del aparato extensor de la rodilla.