Tobillo
La articulación del tobillo une el pie y la pierna. Está formada por tres huesos: el peroné, la tibia y el astrágalo. Los dos primeros forman una bóveda en la que encaja la cúpula del tercero.
Es una articulación compleja que permite movimientos de giro hacia delante y hacia atrás y también movimientos en sentido lateral, si bien los apéndices óseos de peroné y de la tibia a ambos lados, impiden un movimiento completo de giro lateral aunque sí permiten su inicio. Los ligamentos, que conectan los huesos entre sí, estabilizan y dan soporte al tobillo y los músculos y tendones lo mueven.
El astrágalo se apoya sobre el hueso del talón (calcáneo) formando una articulación bastante plana, que tiene escaso movimiento y que es el origen de numerosos problemas ya que soporta el peso corporal y rige movimientos finos de estabilidad del pie. Cuando el cartílago de esta articulación se deteriora se produce una degeneración artrósica y dolor, que en ocasiones obliga a la intervención quirúrgica para suprimirlo o aliviarlo.
Principales problemas del tobillo
- Torceduras
Las torceduras o esguinces, son lesiones en los ligamentos. - Fracturas
Las fracturas son roturas del hueso. - Lesiones en tendones y cartílagos
Lesiones del cartílago articular (osteocondritis) - Síndrome de impingement.
Cuando tras un esguince se forma un tejido cicatrizal o fibrosis dentro de la articulación, que se pellizca y genera dolor en determinados movimientos.
Preguntas frecuentes
Llevo años con dolor en un tobillo a raíz de un esguince mal curado, el médico me dice que no hace falta operar porque no hay inestabilidad, ¿qué puedo hacer?
A veces, tras un esguince se forma un tejido que pellizca dentro de la articulación, o una zona de cartílago del astrágalo se suelta. Ambas patologías se pueden tratar por artroscopia.